Béjar,

Un encuentro con la historia en el corazón de la sierra.

Historia de Béjar

Béjar, una ciudad castellana situada en el sur de la provincia de Salamanca, es un lugar lleno de historia. A lo largo de los siglos, ha sido hogar de vetones, romanos, visigodos, árabes y judíos. Esta diversidad de culturas y raíces ha forjado en los bejaranos un espíritu tenaz y perseverante, reconocido a través de los tiempos. En 1396, don Diego López de Stúñiga intercambió la villa de Frías por la de Béjar con el rey Enrique III de Trastámara. Así, Béjar dejó de ser una villa de realengo para convertirse en dominio señorial, iniciando un proceso de transformación lento pero constante. La ciudad ostenta prestigiosos títulos regios: Muy Leal, concedido por los Reyes Católicos; Muy Noble, otorgado por Alfonso IX; y Liberal y Heroica, reconocido por Práxedes Mateo Sagasta tras la caída de Isabel II. Estratégicamente ubicada en el Camino de la Plata, Béjar ha sido un punto clave por su tradición textil lanera desde el S. XIII. Se erige como un oasis de Castilla, ofreciendo paisajes de paz, aguas  cristalinas, verdes campos y las imponentes nieves de la Sierra, que forman parte de la Cordillera Central.

Enclave geográfico privilegiado

En esta Sierra destaca El Calvitero, con 2.401 metros de altitud, junto a La Ceja, con 2.425 metros, que vigilan imponentes la ciudad. En su cara sur, se extiende El Castañar, un bosque de castaños donde se encuentran el Santuario de la Virgen del Castañar, patrona de Béjar y su comarca, y la Plaza de Toros más antigua de España (1711), conocida como La Ancianita.
 

Además, Béjar cuenta con la estación de esquí La Covatilla, caracterizada por la amplitud de sus pistas en suave pendiente que, junto a los cuidados de la nieve, proporcionan unas magníficas condiciones para la práctica del esquí y disfrutar del deporte blanco en familia.

Entre los municipios de interés cercanos, destacan lugares emblemáticos como Candelario, Montemayor del Río y Baños de Montemayor, así como su proximidad a Barco de Ávila y Hervás, convirtiendo la región en un destino de gran atractivo.